Andrés Dachary, Secretario de Malvinas, Antártida, Atlántico Sur y Asuntos Internacionales de Tierra del Fuego, puntualizó las principales propuestas que el Gobierno de la provincia pretende incorporar al proyecto de reforma de la Constitución planteado por el gobernador Gustavo Melella; referidas a la Cuestión de las Islas Malvinas.
Además, se explayó sobre el fundamento que manejan con respecto a la redacción de los artículos a reformar, en una tendencia a incorporar Malvinas dentro de la denominación provincial y promover una legislación abarcativa de todo el amplio territorio, sin hacer eje en la usurpación, en el entendimiento que se trata de una situación coyuntural.
En el curso de la conversación con Agenda Malvinas, Dachary compartió no sólo las iniciativas concretas, sino también los fundamentos que respaldan la necesidad de legislar de determinada manera.
El funcionario subrayó la importancia de considerar la inclusión de Malvinas en la denominación provincial como parte de una visión integral del territorio. En sus propias palabras, se trata de "repensar el nombre de la provincia como de máxima, incorporando la denominación Malvinas”. Es decir, que la provincia se denomine: “Tierra del Fuego, Malvinas, Antártida e Islas del Atlántico Sur”. Este enfoque, según Dachary, no sólo busca reconocer el pasado histórico, sino también proyectar una identidad más completa y arraigada.
En relación con las cláusulas transitorias propuestas, Dachary argumentó que es esencial tener un marco normativo específico en lugar de condicionar todas las normativas provinciales a la situación de ocupación británica en Malvinas. Durante la entrevista detalló que se propone "una cláusula transitoria primera que le dé una entidad propia a todo lo que tiene que ver con la Cuestión de las Islas Malvinas, para que funcione como un gran ordenador para todos los desarrollos normativos, que estén enfocados en nuestras Islas”, en una perspectiva que busca evitar que la ocupación británica condicione todas las leyes provinciales, permitiendo un enfoque más específico y ajustado.
En cuanto a la capital provincial, Dachary planteó la posibilidad de volver al criterio de 1829, con la creación de la Comandancia de las islas del Atlántico Sur y del sector de la Isla Grande de Tierra del Fuego bajo esa jurisdicción, manteniendo Ushuaia como sede del Gobierno mientras subsistiera la ocupación y retomando Puerto Argentino como capital, lo que se haría efectivo tras la recuperación del ejercicio de plena soberanía.
Por otro lado, el Secretario también planteó la necesidad de una legislación más abarcadora en relación con las leyes malvineras, comentando que "nosotros vamos a proponer cambios a la ley Gaucho Rivero, principalmente modificando el criterio que solamente contempla a Malvinas (Departamento Islas del Atlántico Sur) , haciéndolo extensivo a la totalidad de la provincia y que, a su vez, condicione a toda embarcación que desconozca la soberanía argentina y la jurisdicción fueguina, invariablemente de la bandera que porte,”, denotando con sus palabras la intención de proteger no sólo los intereses de Malvinas, sino los de toda la provincia.
"Muchas veces se han llevado adelante iniciativas que más allá de la buena intención que las impulsaba, el tiempo ha demostrado que deben ser repensadas por caer en contradicciones o tener una mirada sesgada respecto a los intereses provinciales que tenemos que proteger y defender, esta reforma nos brindará la enorme oportunidad de modificar esto y crear herramientas claves para profundizar nuestro ejercicio de gobierno, potenciar nuestro reclamo y por ende, catalizar la reapertura de negociaciones”, compartió al desgranar su enfoque basado en evitar legislaciones que, aunque suenan bien en principio, carezcan de lógica y no aborden adecuadamente los desafíos territoriales.
En resumen, la posición del Gobierno de Tierra del Fuego en relación con Malvinas se centra en la oportunidad de incorporar a las islas en la denominación, promover el cambio de capital provincial, incorporar en la letra constitucional leyes vigentes. Pero, en definitiva, legislar con la plena conciencia de Malvinas como parte integrante de la provincia, por lo tanto, debe ser objeto indisoluble de las leyes provinciales, evitando circunscribir todo a una usurpación que, aunque concreta y real, es a todas luces ilegal e ilegítima.
Las propuestas punto por punto:
1 - Incorporar a Malvinas en el nombre de la provincia, quedando de la siguiente manera: Tierra del Fuego, Malvinas, Antártida e Islas del Atlántico Sur.
2 – Trasladar la Capital provincial a Puerto Argentino, manteniendo a Ushuaia en la actual situación como sede del gobierno mientras subsistiera la ocupación colonial británica.
3 - Declarar inembargable los recursos y riquezas naturales de la provincia e imposibilitar que los mismos sean sujetos de empréstitos nacionales.
4 – Incorporación de una Clausula Transitoria que permita operar como ordenador para que toda normativa relacionada con la Cuestión de las Islas Malvinas, se enfoquen específicamente con las mismas.
5 – Ratificar la condición de connacional a los nacidos en las Islas Malvinas.
6 – Reconocer la condición de héroes y heroínas de Malvinas a quienes participaron en la guerra de 1982.
7 – Dejar establecido el reconocimiento a los expedicionarios del desierto blanco y a los pioneros antárticos.
