Según detalló el reciente Informe N° 142 de la Jefatura de Gabinete, presentado a la Cámara de Diputados del Congreso de la Nación, la Fuerza Aérea Argentina (FAA) prevé el funcionamiento de las aeronaves en Santa Cruz y probablemente Río Grande.
Las FAA proyecta el despliegue de los aviones en otros puntos del país, además de la VI Brigada Aérea de Tandil, en la provincia de Buenos Aires. El foco estaría puesto en el sur, ya que en la presentación en la Cámara Baja del Parlamento Nacional se indicó que “el SARm F-16 desplegará fuera de su Brigada de asiento a los aeropuertos que sean compatibles con su operación para el control del espacio aéreo de jurisdicción”. Y agregaron que “con respecto a las obras, está prevista la repavimentación de la pista de Río Gallegos”.
Aunque el informe no detalla explícitamente la llegada de estos aviones a la X Brigada Aérea de Río Gallegos -que se considera un punto estratégico por su ubicación y capacidades actuales-, sí se menciona la repavimentación de la pista en dicha base de la provincia de Santa Cruz.
A lo largo del año, también se llevará a cabo otra obra de envergadura en la región: la pavimentación de la pista del aeropuerto de Río Grande, en Tierra del Fuego, poniendo en condiciones otra de las principales bases de la Patagonia austral.
La Fuerza Aérea Argentina, mediante el programa Peace Condor, busca adquirir los cazas en condiciones de vuelo, con la llegada prevista de los primeros ejemplares provenientes de Dinamarca a fin de año.
Por ahora, lo que se sabe es que los F-16 no enfrentarían restricciones operativas por parte de Estados Unidos respecto a su empleo en el Atlántico Sur, según la misma fuente oficial.
Teniendo en cuenta que las aeronaves son de origen norteamericano, en Diputados surgió la pregunta en ese sentido: “…si Estados Unidos estableció algún tipo de restricción operativa al Sistema de Armas F-16 y/o su armamento para operar, por ejemplo, sobre el Atlántico Sur”.
La respuesta de Jefatura de Gabinete fue que “no se han establecido restricciones operativas por parte de los Estados Unidos respecto al empleo del sistema de armas F-16, ni sobre su armamento, incluyendo su operación en el Atlántico Sur”.
FUENTE: