La reciente firma de un acuerdo entre el gobierno de Chubut y la empresa china Hongdong Fisheries desató la polémica. El convenio permite el acceso a puertos y logística para el sector pesquero y reaviva el debate sobre la presencia de numerosas embarcaciones de bandera asiática en el Atlántico Sur, teniendo en cuenta sus implicaciones de depredación sobre las poblaciones marinas.
El acuerdo es similar a lo pactado previamente con la provincia de Santa Cruz, donde una iniciativa similar también generó controversia.
El ministro plenipotenciario de China en Argentina, Wei Wang, expresó su compromiso de visitar Chubut para avanzar en un cronograma de acciones derivadas del convenio, siendo que China busca consolidar un “corredor seguro” en la región para asegurar los servicios de mantenimiento para su flota pesquera.
Inmediatamente el asunto ha sido objeto de críticas debido a las acusaciones contra la flota china de depredación de las poblaciones de calamar en la Zona Económica Exclusiva (ZEE) argentina.
Sin embargo, el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, habló de “la importancia de ofrecer asistencia a las embarcaciones que capturan calamar, una de las principales especies explotadas en el área”.
“Estamos frente a la posibilidad de tener un corredor seguro y poder rubricar convenios para el acceso a los servicios de combustible, alimentos y mantenimiento de aquellos barcos que pescan calamar”, remarcó el mandatario.
Torres enfatizó que el objetivo es dar sustento al funcionamiento de la "armada china", al mismo tiempo que mostró su intención de atraer futuros inversores al resaltar el potencial energético, productivo, industrial y turístico de la provincia.
Estos acercamientos entre gobierno provinciales y China suscitan preocupaciones a nivel nacional debido al comportamiento de la flota china, que operando con más de 350 barcos, está acusada de saquear especies marinas cercanas a la milla 201 de la ZEE argentina.
El pacto con Chubut ya tiene un antecedente. Claudio Vidal, gobernador de Santa Cruz, también firmó un acuerdo previamente con la misma empresa, habilitando a los buques chinos para utilizar puertos y otras infraestructuras provinciales con el fin de “agregar valor a los recursos marítimos”.
Lo rubricado en este caso incluye mejoras en cinco puertos provinciales, la construcción de astilleros y el desarrollo de nuevas plantas pesqueras, a pesar de que paralelamente se genera oposición en razón de la sostenibilidad de los recursos marinos argentinos.
FUENTE:
ESCENARIO MUNDIAL
