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Aunque el gobierno prometió no avanzar con Gran Bretaña sin negociar por Malvinas Inglaterra tiende puentes comerciales con San Juan

Mientras el presidente y el funcionariado argentino viaja, realiza actos y conferencias de prensa, pronuncia discursos y redactan documentos que no reflejan de ninguna manera una defensa seria y monolítica de Malvinas; la cancillería habilita que la embajadora británica recorra las provincias, se reúna con los gobernadores e inicie negociaciones para que las empresas inglesas intervengan y tomen control de los recursos estratégicos de la Nación. ¿Dónde se decide el presente y el futuro de Malvinas y del País?

7 de noviembre de 2022 15:38

La embajadora británica Kirsty Hayes en encuentro oficial con funcionarios del gobierno de San Juan

Incumpliendo el reclamo que él mismo le hiciera al ex primer ministro inglés Boris Johnson; en cuando a que “no habrá avance bilateral sin negociar Malvinas”, Alberto Fernández no solo no instrumentó una reglamentación que materializara ese pronunciamiento político, sino además permite que la embajadora británica Kirsty Hayes recorra las provincias, se reúna con los gobernadores e inicie negociaciones para que las empresas inglesas intervengan y tomen control de los recursos estratégicos de la Nación.

Así, la embajada del Reino Unido en la Argentina muestra mucha más coherencia para sostener el enclave colonial en las Islas Malvinas, su constante expansión en el Atlántico Sur y a su vez garantizar las inversiones británicas a lo largo y ancho del País en sectores estratégicos, que las insignificantes acciones encaradas por el gobierno para defender y recuperar los derechos soberanos reconocidos por el 99 % de los países que integran las Naciones Unidas y por el otro, desarrollar una necesaria industria nacional.

Con tan solo repasar los últimos cuatro meses de la realidad política y gubernamental de la Argentina, y en simultáneo las acciones encaradas por la embajadora británica en nuestro País, Kirsty Hayes; se puede comprobar cuál es la realidad entre lo que se dice y lo que se hace para recuperar las islas Malvinas del yugo colonial inglés.

El recibimiento del gobernador Uñac a la embajadora Hayes, con formación y banda militar interpretando “Avenida de las Camelias”

Si no hubiera dicho nada, no habría tomado relevancia. Pero fue el propio presidente argentino quien, en una bravuconada; el 27 de junio pasado en Alemania, le dijo al exprimer ministro británico Boris Johnson que “no existe posibilidad de avances mientras no se comience una negociación por la soberanía de las Islas Malvinas”.

La realidad mata relato. Tan es así, que el 29 de junio, 48 horas después de ese encuentro en Alemania, el reclamo a Gran Bretaña que constituyó a su vez, un compromiso con el pueblo argentino por parte del Presidente; comenzó a descascararse, cuando el gobernador de Jujuy Gerardo Morales (UCR-Cambiemos) recibía a la embajadora del Reino Unido en Argentina Kirsty Hayes y la declaraba Invitada de Honor y Huésped Oficial.

Los motivos de la visita a Jujuy, los expresaba la propia diplomática: "Jujuy es una provincia muy importante para nosotros en términos comerciales, en áreas de la minería, negocios, investigación y medio ambiente". Y poniendo como objetivo central, el interés por el Litio.

Acto seguido, el 6 de julio; el gobernador salteño Gustavo Sáenz (PJ- Frente Renovador) también recibía en su despacho a Kirsty Hayes y así lo contaba en su cuenta de twitter: “Recibí a @AmbKirstyHayes, embajadora del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte en Argentina, con quien conversamos sobre la agenda bilateral, inversiones y temas de interés común en nuestras regiones”.

La semana pasada, pocas horas antes que en Ushuaia el gobierno nacional y las provincias celebraran el II Plenario del Consejo Federal de Relaciones Exteriores y Comercio Internacional y se firmara la Declaración Malvinas; un documento donde se reafirmó “los legítimos derechos argentinos” sobre los territorios ocupados y se destacó “la importancia de mantener una política de estado respecto de la Cuestión de las Islas Malvinas”; la embajadora británica recorría San Juan y se entrevistaba con el gobernador Sergio Uñac (Frente de Todos) “para colaborar en áreas como el comercio, el medioambiente, la justicia y la seguridad”.

De tal forma, y por tercera vez; quedó evidenciado el incumplimiento directo de Alberto Fernández en no concretar con hechos, la palabra empeñada en Alemania como advertencia directa a Gran Bretaña. Y a su vez, la falta de respecto a la Nación de un Presidente, quien antes de redactar un decreto o enviar al Congreso un proyecto de ley que establezca los límites de una nueva relación bilateral con el Reino Unido hasta tanto no se habrá un diálogo por la soberanía de Malvinas; opta por convalidad la injerencia de la embajada británica por encima de la constitución, las leyes y sus propios compromisos. Sobre todo, pisoteando él mismo, las dignas aspiraciones de millones de argentinos y argentinas, y la memoria de quienes murieron en 1982 por una soberanía cada vez más lejana.

Por Agenda Malvinas

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