En un esperado acto de reparación histórica, el legajo de la escuela secundaria de Rolando Máximo Pacholczuk, soldado caído en combate en Malvinas en 1982, fue corregido en un emotivo acto que se llevó a cabo este martes.
Pacholczuk, en el año 1982 cursaba cuarto año del ciclo secundario en la Escuela Excomercial de La Plata, Buenos Aires, en el turno noche. Debió obviamente interrumpir el estudio por haber sido convocado a Malvinas.
Allá fue herido de muerte el último día del conflicto, el de la rendición, el 14 de junio. Falleció dos días después a bordo del rompehielos almirante Irízar, cuando se lo trasladaba al continente junto a sus compañeros sobrevivientes.
Sin embargo, en el legajo de su escuela figuraba que el joven “abandonó los estudios”.
Este martes, 40 años después de su fallecimiento, en un acto realizado en la propia escuela y encabezado por el director General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, Alberto Sileoni, se corrigió el legajo. Donde decía que había abandonado los estudios, ahora dice “Héroe de Malvinas”. La mamá de Rolando, Raquel, de 91 años, se llevó una copia del documento oficial.
El legajo del joven también fue corregido en el lugar donde constaba “adeuda materias”, suplantando ese texto con dos sellos en tinta azul, uno dice “legajo reparado” y el otro también “Héroe de Malvinas”. Al pie están las firmas de Sileoni y de la directora de la escuela e impulsora de acto reivindicatorio, Giselle Martín Ocampos.
Previo al acto de reparación, se descubrió una placa que designa con el nombre de “Rolando Pacholczuk” al aula donde cursaba sus estudios. Entre los presentes se vio a varios de quienes fueron sus compañeros de estudios en aquel entonces. Una de ellas, Yoly Aranda, viajó desde Formosa expresamente para el homenaje a su compañero de estudios.
Hugo Robert, vicepresidente del CECIM La Plata y excompañero de trinchera de Rolando, recordó que “quería recibirse de perito mercantil y ser contador como su padre”. Y anheló que “sería genial” que se le entregara el título postmortem.
También su camarada reveló un angustioso detalle que afectó a Rolando durante todo el conflicto bélico, y que lamentablemente no fue el único caso: “Rolando fue víctima de la dictadura, estuvo toda la guerra con un fusil que no andaba. Cuando hicimos la prueba de tiro, su FAL no disparaba. Toda la guerra estuvo esperando que le reemplazaran el arma o se la corrigieran y nunca sucedió”, dijo Robert.
Además, relató que “era un tipo muy arriesgado para conseguir comida, él sufrió mucho el hambre, habrá perdido 20-25 kilos en la guerra”.
Rolando resultó herido en la guerra el 14 de junio y falleció dos días después a bordo del Irízar. Sus restos yacen en el cementerio de Mar del Plata, de donde era oriundo. Es el último muerto de la guerra de Malvinas, y sería el único enterrado en el continente.
Fuente:
Télam
https://www.telam.com.ar/notas/202206/595449-reparan-legajo-escolar-soldado-malvinas.html
Por Agenda Malvinas
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