Desde la Asociación Argentina de Abogados/as Ambientalistas denunciaron, en su cuenta oficial de Instagram, que el: “El Gobierno de Milei avanza con un decreto para habilitar la megaminería en zonas protegidas, eliminando el sentido de la Ley de Glaciares al gusto de la megaminería y las petroleras”, señalando que “es una reforma hecha a medida de Barrick Gold y otras empresas contaminantes, disfrazada de modernización, pero cargada de impunidad”.
Como ya hemos informado en Agenda Malvinas, desde que asumió el gobierno de Milei viene tejiendo una trama de intereses fuertemente vinculados con los grandes monopolios mineros. El portal La Unión informó que: “La iniciativa está siendo trabajada por el Ministerio de Economía, bajo la conducción de Luis Caputo, con la participación de la secretaria de Energía, María Tettamanti; el coordinador de Energía y Minería, Daniel González; y el equipo legal de María Ibarzabal”. No será casualidad si los gobernadores de las provincias mineras apoyan esta nueva entrega con el entusiasmo cívico que los caracteriza, ya que siempre se encuentran entre los principales donantes de gobernabilidad, tan necesaria para seguir garantizando el saqueo del gobierno libertario.
Por su parte, el portal Nexofin afirmó que: “El equipo técnico de la Casa Rosada trabaja en una nueva reglamentación de la Ley 26.639, que regula la protección de los glaciares y el ambiente periglacial. El objetivo, según fuentes oficiales, es brindar seguridad jurídica a las inversiones”.
Desde la Asociación Argentina de Abogados/as Ambientalistas denunciaron que Milei avanza con un decreto para habilitar la megaminería en zonas protegidas, eliminando el sentido de la Ley de Glaciares al gusto de la megaminería y las petroleras. “Quieren legalizar lo ilegal: abrir territorios periglaciares al saqueo, reducir la protección de nuestras fuentes de agua a las mineras”, y advierten que los glaciares no se negocian porque “son nuestras reservas estratégicas de agua, regulan el clima y garantizan vida en los territorios de montaña y en las cuencas que alimentan”.
En otro acto de sumisión a los poderes del imperialismo angloyanqui, el gobierno de Javier Milei insistirá con el polémico cambio en la Ley de Glaciares, ya que necesita imperiosamente mostrar señales de dinamismo económico y mayor apertura hacia los mercados.
“Desde el Ejecutivo reconocen presiones del sector empresarial y sostienen que buscan brindar "seguridad jurídica" para atraer inversiones”, indicó La Unión, ya que la intención del gobierno “es reducir las áreas protegidas a aquellas formaciones de roca o escombros activos que cumplan con criterios específicos”, tales como “superficie mínima de una hectárea, persistencia de al menos dos años, función hídrica relevante y registro en el Inventario Nacional de Glaciares”.
Para lograrlo, no dudarán en reducir el alcance de las áreas protegidas habilitando nuevas zonas de explotación minera e hidrocarburífera a favor de los monopolios. Esta modificación ya había sido incluida en la Ley Bases, pero fue rechazada. Por esa razón, y para tratar de evitar un nuevo percance, esta vez Milei lo hará por decreto y sin pasar por el Congreso.
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