"El Eternauta", la serie argentina que lidera las películas más vistas en Netflix a nivel mundial; continúa brindando detalles de calidad a poco tiempo de su estreno. Basada en la historieta que le da su nombre, es creación del guionista Héctor Germán Oesterheld, quien se encuentra desaparecido junto a sus cuatro hijas -dos de las cuales estaban embarazadas- y tres yernos; y del dibujante Francisco Solano López.
El comic escrito por Oesterherld en 1957 es contemporeneizado, por el director de la serie Bruno Stagnaro Díaz; con un Juan Salvo, veterano de Malvinas y habiendo combatido en la batalla de Monte Tumbledown, situándolo entre los soldados argentinos que combatieron durante la noche del 13 y la madrugada del 14 de junio 1982, horas antes de la rendición y caída de Puerto Argentino. Un enfrentamiento feroz y encarnizado, con gran poder de fuego y combates cuerpo a cuerpo.
Monte Tumbledown, la última gran resistencia antes de la caída de Puerto Argentino.
Tumbledown, en uno de los montes o cerros que rodea Puerto Argentino, el último en caer; allí combatió un Juan Salvo personificado por Ricardo Darín; encarnado simbólicamente la vivencia de guerra de uno de los soldados que combatieron en la Compañía Nácar del BIM5, en la Compañía G del Regimiento 4, otra del Regimiento 6 o de la asistencia que brindaron dos secciones de la Compañía D del Regimiento Infantería 25.
Pero la serie no solo desarrolla su trama en torno a un Buenos Aires postapocalíptico con un Juan Salvo Excombatiente de Malvinas, sino que además reivindica la soberanía argentina de las Islas, donde la versión subtitulada al inglés de la serie utilizó el topónimo de Malvinas descartando la denominación británica de “Falklands”.
Así lo explica en su cuenta de LinkedIn Daiana Estefanía Díaz, que trabajó en la pieza audiovisual como traductora: "Era la única opción viable, no tuve la menor duda", dice.
“Jamás se me ocurriría usar en ese contexto y en una producción argentina un nombre que no sea Malvinas, pero además porque sé que ningún argentino, sea real o ficcional, las llamaría de otro modo”, sostuvo la traductora a través en sus redes sociales. “Cuento este detalle y pienso que tal vez puede resultar algo obvio, pero no podemos dar las cosas por sentadas ni dejar nada librado al azar, en especial cuando se trata de un proyecto de alcance mundial que se difunde en una plataforma tan conocida". agregó Díaz.
Por ese motivo en todos los subtítulos y doblajes en checo, italiano, danés y japonés también utilizan Islas Malvinas, único nombre válido del archipiélago. "Es un tema sensible y muy presente que nos atraviesa en el ámbito político, histórico, cultural y social... Nos asienta en un lado de la historia del que no nos vamos a mover. No se trata de caprichos personales ni de intransigencias, sino de buscar transmitir de manera fiel, auténtica y profesional la esencia y la idiosincrasia de estos personajes", aseguró Díaz, resaltando que al público le va a gustar "aprender algo más" sobre cómo los argentinos vemos el mundo.