La minera anglo-australiana Rio Tinto confirmó la compra de Arcadium Lithium por USD 6.700 millones, consolidando su negocio en el mercado del litio a nivel global, informó Infobae.
El anuncio se realizó el pasado miércoles, luego que los consejos de administración de ambas compañías aprobaran la transacción. “La compra de Arcadium se considera un paso estratégico para Rio Tinto, especialmente en el contexto de la creciente demanda de minerales críticos para la transición energética mundial. La definición de la operación fue seguida de cerca por el sector a nivel global y local, y la conclusión es por un monto que más que duplica las estimaciones de valuación”, aseguró el mismo medio.
La noticia se conoció luego que el gobierno de Javier Milei enviara una delegación encabezada por el Secretario de Minería de la Nación, Luis Lucero, a participar en la última edición del “London Metal Exchange Week 2024” (LME).
Tal como informáramos en Agenda Malvinas, Lucero fue “acompañado por cinco gobernadores de la oposición “dialoguista” que “integran tanto la Mesa del Litio como la del Cobre: Carlos Sadir, de Jujuy; Gustavo Sáenz, de Salta; Raúl Jalil, de Catamarca; Marcelo Orrego, de San Juan; y Alfredo Cornejo, de Mendoza. La provincia de Río Negro también fue parte de la delegación, representada por su Ministra de Producción, Andrea Polizzi”.
Jakob Stausholm, director ejecutivo de Rio Tinto, destacó que la adquisición fortalece la capacidad de la empresa para liderar en la producción de materiales esenciales para la transición energética. “Esta compra crea un negocio de litio de clase mundial junto a nuestras operaciones de aluminio y cobre”, declaró Stausholm, resaltando que el litio será un componente clave para el suministro de baterías en los próximos años.
Para nuestro país esta compra es significativa, ya que Arcadium Lithium es un actor estratégico en el desarrollo de la explotación del litio argentino. Actualmente, opera dos de los cuatro proyectos activos que producen carbonato de litio en Argentina: el proyecto Olaroz en Jujuy y el proyecto Fénix en Catamarca. Estos activos representan una porción importante de la capacidad productiva del país, que se ha triplicado en los últimos dos años, según datos de la Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM).
Argentina cuenta con la cuarta reserva mundial de carbonato de litio, por eso se ha transformado en un delicioso y apetecible bocado para los grandes pulpos que juegan en el mercado mundial del litio. Con la adquisición de Arcadium, la anglo-australiana Rio Tinto se asegura la materia prima y la participación en un sector que viene experimentando un enorme incremento debido a la creciente demanda de vehículos eléctricos y la necesidad de almacenar energía renovable.
Con la compra de Arcadium, la empresa Rio Tinto fortalece su posición en Argentina, pero además también obtiene acceso a minas y plantas en países estratégicos como Australia, Canadá y Estados Unidos. Además, tal como Infobae destaca, “Arcadium tiene una sólida base de clientes que incluye a gigantes como Tesla, BMW y General Motors, lo que coloca a Rio Tinto en una posición privilegiada para capitalizar la creciente demanda de vehículos eléctricos y baterías”.
La entrega: única política de Estado de Alberto Fernández y de Javier Milei
A diferencia de Chile y de Bolivia que el Litio fue declarado como reservas estratégicas de ambas naciones, la entrega de este mineral por parte de Javier Milei a Gran Bretaña, es continuidad de la política que llevó adelante el gobierno de Alberto Fernández, asociada a los incumplimientos permanentes con relación a la defensa de la soberanía de las Islas Malvinas.
En julio de 2022, Fernández se reunió con el primer ministro británico, Boris Johnson, en la ciudad alemana de Bonn y, según trascendió a la prensa en aquel momento a través de la desaparecida Telam, el exmandatario argentino le planteo a su par británico, que hasta tanto no se dialogue por la Cuestión Malvinas, no habría intercambio comercial entre Argentina y el Reino Unido. Pero, días después, la embajadora británica en Argentina, Kirsty Hayes, recorrió las provincias pasando por encima de lo que habían sido las declaraciones del presidente, como de las disposiciones que se suponen son las políticas de Estado en la materia.
Claramente, esta política de sumisión al colonialismo británico sigue siendo una constante de los últimos gobiernos. Y toma un nuevo rumbo con el viaje a Londres que Luis Lucero, actual Secretario de Minería del gobierno de Javier Milei, realizó junto con los gobernadores y representantes de las provincias de Jujuy, Salta, Catamarca, San Juan, Mendoza y Río Negro, abriendo el juego a las mineras británicas. No es casualidad que una semana después del viaje a Londres, la minera Rio Tinto termina quedándose con Arcadium en Argentina.
Tal como lo señaláramos en Agenda Malvinas, el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, y la ministra de Energía y Ambiente, Jimena Latorre, se reunieron en la London Metal Exchange Week 2024 (LME Week), con representantes de empresas líderes del sector, en particular de la producción del cobre. Se trata de las compañías Broken Hill Proprietary’s (BHP) de Australia y la Corporación Nacional del Cobre de Chile (Codelco).
A principios de agosto, la agencia de noticias Tierra Viva informaba que “las corporaciones mineras BHP y Lundin comunicaron su asociación para explotar de manera conjunta los proyectos Filo del Sol y Josemaría, ambos en San Juan”. Desastres ambientales, muertos, violencia y demandas laborales son parte del historial de las mineras BHP y Lundin Mining, las multinacionales que anunciaron su fusión para explotar ambos proyectos en San Juan. Las dos mineras amontonan denuncias y condenas en Chile, Brasil, África y Australia. Sin ir más lejos, “BHP fue responsable del desastre minero en Minas Gerais, con 19 fallecidos y cientos de casas destruidas”, destacó Tierra Viva.
Podemos decir que la megaminería sí es una política de Estado, tanto para las distintas administraciones nacionales como para los gobiernos de las provincias de Jujuy, Salta, Catamarca, San Juan, Mendoza y Río Negro. Sus mandatarios, generalmente han dado claras muestras y señales de haber estado siempre alineados con los intereses de las grandes empresas multinacionales del sector. Mucho más si éstas son británicas o de algún país integrante del Commonwealth.
Es un verdadero acto contra los intereses soberanos de la Nación, que los gobernantes y funcionarios, ya sean nacionales o provinciales, no tengan el mismo celo y empeño en sostener nuestros reclamos sobre Malvinas e islas del Atlántico Sur, ni tampoco sostengan una fuerte política contra los intereses del enemigo invasor británico. Por el contrario, siempre están gustosos de mostrarse serviles y complacientes con el enemigo en contra de los intereses del pueblo y de la patria.
Fuentes:
