Los cuatro patrulleros oceánicos (OPV) comprados a un astillero privado francés a precio exorbitante, para supuestamente controlar a las embarcaciones chinas que depredan nuestro calamar al borde y muchas veces dentro de la milla 200, siguen amarrados en la base Naval de Mar del Plata desde hace meses, según pudo constatar Agenda Malvinas.
Luego de la publicación, el 28 de julio pasado, de fotografías en donde se observa a los cuatro buques franceses uno al lado del otro inmóviles en esa base marplatense de la Marina, la noticia a transmitir casi un mes después, es que las OPV siguen en el mismo sitio, sin prestar servicio ni operar para cumplir con los objetivos para los cuales fueron pagadas, insistimos, a un sospechosamente alto precio.
Como documentación, compartimos hoy en Agenda Malvinas una nueva fotografía tomadas esta vez el domingo 21 de agosto, que ratifica la presencia de las naves en el mismo lugar.
Coincidentemente, en estos precisos momentos transcurre la segunda temporada del calamar en al Atlántico Sur. Por estas semanas, no solamente los buques chinos (y coreanos, tailandeses, españoles y portugueses) pescan calamar a sus anchas en el límite y dentro de la ZEE, sino también la flota gallega lo hace en aguas circundantes de Malvinas, con licencias del ilegítimo gobierno británico que ejerce en el archipiélago que usurpan.
Cabe recordar que las OPV costaron la friolera de 319.034.689 (trescientos diecinueve millones treinta y cuatro mil seiscientos ochenta y nueve) euros, es decir, a valor oficial vigente, 43.451.886.572 (cuarenta y tres mil cuatrocientos cincuenta y un millones ochocientos ochenta y seis mil quinientos setenta y dos) pesos argentinos.
Mientras todo esto ocurre, con las OPV “en puerto” y sin que nadie controle eficientemente a las flotas extranjeras que se llevan cuantiosas riquezas, los estibadores y trabajadores de los puertos de la Patagonia, al borde de la inanición, ruegan a través de sus diputados que, aunque sea, les permitan a esos buques recalar en el continente, para venderles servicios y logística.
Finalmente, cabe acentuar que la inactividad de las lanchas patrulleras ya no es responsabilidad de la Armada, que ya jugó su papel en su momento ejerciendo presión para que se compren a Francia en lugar de construirlas en el país por un costo muchísimo menor. Según pudo confirmar Agenda Malvinas, las OPV están parados por una decisión política adjudicable en un todo al Ministerio de Defensa de la Nación.