Este martes 15, a las 20:55 de la noche; aterrizó en el aeropuerto Malvinas Argentinas de la ciudad de Ushuaia, el Boeing 767-200 cisterna, matrícula MM62228, de la Aeronáutica Militare italiana.

La aeronave forma parte de la flota afectada a las operaciones de la OTAN, y arribó a la capital de Tierra del Fuego proveniente de la de la colonia francesa caribeña de Guadalupe; luego de un vuelo de 9 horas con 56 minutos.

Así puede documentarse en los registros de seguimiento satelital mundial que realiza de manera permanente y continua, www.flightradar24.com, que posiciona a la aeronave aún en la plataforma del aeropuerto ushuaiense.

 Oficialmente a nivel nacional, desde el Ministerio de Defensa o desde la Cancillería argentina; no se ha conocido ningún tipo de información que explique la presencia del avión militar italiano. Tampoco desde el gobierno de Tierra del Fuego. Aunque, cuando se lo consultó este mediodía al gobernador Gustavo Melella, respondió que se encargaría de averiguar.

Una pista: algo similar con el mismo avión sucedió en junio de 2017, cuando la aeronave llegó al aeropuerto fueguino directamente desde Fortaleza, Brasil, realizando un adiestramiento en vuelo sobre el mar, sin horizonte terrestre.

Toda la información consultada, ratifica que la Fuerza Aérea Italiana, es un componente clave de la OTAN, y que efectivamente contribuye con capacidades aéreas a las operaciones de la alianza. Participando con ella, en ejercicios y misiones, incluyendo operaciones de combate, transporte y reabastecimiento en vuelo. En este último caso, desde 2011, con cuatro aviones cisterna KC-767A, basados en el Boeing 767-200ER, como el que aterrizó el martes a la noche en la ciudad de Ushuaia.